Avanzando hacia el nuevo milenio en los ocho años transcurridos desde la tercera temporada, Happy Valley ha expandido rápidamente su huella en Marte al convertir a antiguos enemigos en socios. Ahora, en 2003, el programa espacial se centra en la captura y extracción de asteroides extremadamente valiosos y ricos en minerales que podrían cambiar el futuro tanto de la Tierra como de Marte. Pero las tensiones latentes entre los residentes de la base internacional, ahora en expansión, amenazan con deshacer todo aquello por lo que están trabajando.