Gringa es la propietaria de un burdel en el interior de Brasil, y a pesar de haberse quedado ciega y estar muy enferma, insiste en cumplir su último deseo: ir a Venecia y pedir perdón al amante que abandonó décadas antes. Para llevarla a la ciudad italiana, Tonho, Rita y las otras chicas que trabajan para Gringa idearán un plan fantástico con la ayuda de una troupe de circo.