Cuando el castillo más grande de Inglaterra es robado por un famoso jefe criminal, lo último contra lo que él y su banda criminal esperaban enfrentarse eran dos chicos en BMX. Cuando la madre de los niños deja a sus hijos con su padre corredor de Speedway para un viaje de regreso a San Francisco, su padre de la «vieja escuela» desaprueba el tiempo que éstos consumen en sus consolas y, en su lugar, les recuerda la alegría de la aventura de la vida real.